DIRECTORA DE TEATRO

 
     
 

Etapas de un recorrido. Encuentros…

Mi interés por la escritura, por los poetas, por la diversidad de los universos culturales, por las diferentes resonancias de las lenguas me
llevó hacia la dimensión musical; los encuentros con los compositores Dominique Probst, en los primeros montajes y luego con Ramón de Herrera se cristalizaron en la importancia de esta dimensión en mis espectáculos.

Fue eso lo que me llevó otorgarle una importancia particular al trabajo del lenguaje, iniciado en el montaje de Andrómaca de Racine. Montaje que marcó una etapa fundamental en mi recorrido y que insufló, en mis siguientes puestas en scena, la respiración profunda del texto, su pulso, dos dimensiones que terminaron volviéndose insalvables en mi trabajo
a la hora de montar una obra y en la dirección de actores.

Viene luego el encuentro con una ciudad, suspendida en la luz del Tajo, Lisboa, que engendró en mí el deseo de leer las obras de los escritores portugueses. Correspondencias secretas en la aprehensión del tiempo,
del espacio, del elemento líquido, en la búsqueda de la identidad.

 
 


El encuentro con Sofía de Mello Breyner, gran figura de la poesía contemporánea cuya obra ha conquistado a un vasto público en Portugal; el estreno en Lisboa de Navegaciones, a partir de uno de sus volúmenes de poemas con música de Dominique Probst.

El encuentro con Maria Judite de Carvalho, escritora y con la obra de otros escritores así como con las instituciones portuguesas que han apoyado eficazmente este recorrido y esta nueva etapa que debía extenderse durante varios años -y que todavía no está concluida- dando lugar a los recitales de textos: Del lado del Tajo..., Ahora que nos hemos encontrado y recientemente Sueño y vida, Derrapes del tiempo.

Hay también otros encuentros, con actores, -algunos “reencontrados”
a lo largo de los cursos que he ido dictando- actores seducidos por el trabajo de interpretación con atril que les propuse, por la fragilidad y la fuerza del género, “el hilo de lino de la palabra”*, la fuga de la mirada, la esencia de la emoción. Encuentros con el público que, sorprendido, conmovido, se ha divertido con el viaje, con las sensaciones y las imágenes sugeridas a su imaginación mediante ese “primer plano” del actor y del verbo.

Y aquel encuentro con un campo quemado por el sol en el que la tragedia de Antígona se fue desplegando a lo largo de una experiencia en la que se combinaban la formación y el montaje.

La ruta ha seguido, en profundidad, volviendo a observar todos estos elementos, haciendo el balance (en el sentido musical del término) entre la Tragedia y la dramaturgia contemporánea, entre los Recitales de textos y la puesta en escena.
Anne Petit

* El Minotauro de Sophia Mello de Breyner. En Mediterranée. Traducción al francés de Joaquim Vital. Editions de la Différence.